A pocas semanas de la primavera, el mobiliario de exterior recupera su protagonismo, especialmente el correspondiente a las terrazas, dada su mayor abundancia frente a los jardines en España (sólo 1 de cada 10 viviendas cuenta con zona ajardinada, mientras que más del 46% de nuestros inmuebles dispone de terraza propia, según un estudio de la consultora CoHispania).

De todos los productos, los conjuntos de sillas y mesas volverán a ser los más demandados. La oferta es prácticamente ilimitada, disponible a precios competitivos en ezpeleta sillas terraza y otros fabricantes nacionales. El problema radica en la dificultad para elegirlas, sin cometer equivocaciones que acarreen molestas devoluciones.

En este sentido, es recomendable que los interesados estudien, en primer lugar, el diseño del conjunto de sillas y mesas en relación con el estilo de la terraza donde se utilizarán. La decoración ecléctica, heterogénea conlleva un riesgo, y en muchos casos no ‘sienta bien’ a todos los inmuebles. Más seguro es apostar por estéticas más homogéneas y orgánicas, que además ahorran un tiempo valioso que suele desperdiciarse en el ensayo y el error (cerciorarse de qué combina y qué no).

Así pues, debe tenerse en cuenta el estilo de la terraza a la hora de amueblarla con sillas y mesas adecuadas. Esta consideración es útil, además, para realizar una criba inicial de productos, con el objetivo de concentrarse en los más aptos y viables.

Otro criterio de selección es el confort, hasta qué punto son cómodas las sillas y mesas deseadas. Para resolver esta cuestión, un excelente punto de partida es el uso que recibirán estos muebles. Porque una sillería pensada para el té y la merienda podría ser inapropiada para los almuerzos y cenas, por la altura, la inclinación del respaldo, el exceso de mullido, etcétera. En otras palabras, mayor comodidad no equivale necesariamente a mayor bienestar.