¿Cada cuánto tiempo debo de hacerme una colonoscopia?
Todo el mundo sabe lo importante que es la colonoscopia para la deteccion precoz cancer de colon. Pero ¿quiere esto decir que todos tenemos que pasar por esta prueba de forma periódica para descartar que podamos tener esta enfermedad? Lo cierto es que no y que existen otras pruebas que también pueden ayudar a realizar el diagnóstico.
Para empezar, las personas que no tienen riesgo de cáncer de colon porque no tienen antecedentes ni han sufrido pólipos o problemas similares, no deberían a priori de preocuparse por esto. Si bien no quiere decir que estén libres de padecerla enfermedad, tampoco son propensos a ella y por tanto, no hay motivo para hacer un seguimiento en concreto.
En el caso de que, durante un examen rutinario de sangre, como los que se llevan a cabo anualmente en los reconocimientos médicos, se encontrara un problema, el médico de cabecera iría realizando las pruebas necesarias hasta llegar a la colonoscopia si se considera adecuado.
Pero ¿y las personas que sí tienen antecedentes y riesgo? En estos casos, los protocolos a seguir van a depender del estado físico, del nivel de riesgo y de la edad del paciente. En algunos casos puede ser necesario realizarse una colonoscopia todos los años, pero en otros, si no se ve nada preocupante en las pruebas, se puede limitar el control a un análisis de heces. En el caso de que el análisis de heces diera algo preocupante, entonces se valoraría la colonoscopia.
Uno de los factores que pueden alertar de que hay un problema en el colon es que el paciente, sin razón aparente, tenga bajos los niveles de hierro y que además estaba bajada haya sido de forma brusca. Esto podría estar indicando que el paciente pierde sangre de manera interna. En estos casos se realizaría un análisis de heces para ver si hay o no presencia de sangre en las mismas.
Si el resultado es positivo, lo normal es que el médico solicite la colonoscopia y, si es necesario, un análisis de los niveles tumorales para saber si el paciente puede estar comenzando con un cáncer, ya sea en el colon o en otra parte de su organismo. Es importante señalar que la sangre en las heces puede tener más causas al margen del cáncer de colon como, por ejemplo, la existencia de hemorroides internas o de pólipos.