Un segundo coche en el hogar
¿Cuántas personas hay en tu hogar que tienen carnet de conducir? ¿Y cuántos vehículos? A menudo, en los hogares en los que solo un miembro de la familia trabaja o solo uno trabaja lejos del domicilio, hay un solo vehículo y esta persona se lo lleva cada día durante su jornada laboral. Pero si en casa hay más personas que pueden conducir, ¿no sería más adecuado que hubiera al menos un segundo vehículo para poder hacer recados?
Este vehículo podría servir para hacer la compra o para acudir a realizar gestiones. De este modo, no habrá que esperar a que vuelva de trabajar la persona que se ha llevado el coche para que tenga que acudir a realizar todas estas tareas.
Un segundo coche en el hogar es también una garantía, ya que si un día se estropea el coche principal se podrá utilizar el segundo vehículo para desplazarse al trabajo. Este segundo vehículo, que va a tener mucho menos uso, no tiene por qué ser nuevo, sino que se puede adquirir de segunda mano y ahorrar así dinero en su adquisición.
Se pueden barajar coches citroen de segunda mano de pequeño tamaño, al estilo del C3, ya que no se va a necesitar un gran maletero ni tampoco mucho espacio. Se trata de un vehículo para recados y pequeños desplazamientos y no de un coche en el que se vayan a viajar grandes distancias. Por tanto, lo importante es que sea un vehículo cómodo, manejable y que se aparque fácil. Un coche diseñado para ciudad. El mencionado C3 es un buen ejemplo ya que es un vehículo cómodo, no excesivamente pequeño, pero muy manejable y fácil de aparcar.
Uno de los momentos en los que la familia se plantea comprar un segundo vehículo es cuando uno de los hijos tiene al fin carnet de conducir y comienza a reclamar mayor independencia para salir con sus amigos, acudir a clase o comenzar a desempeñar sus primeros trabajos. En este momento, un solo vehículo deja de ser suficiente y es el momento de adquirir otro, quizás de segunda mano, para que el hijo pueda usarlo y quede, además como segundo coche en el hogar.
Lo que hasta hace poco era un lujo hoy es sin duda una necesidad y raro es el hogar en el que no hay al menos dos coches para uso familiar.